La violencia de género es una problemática muy presente en nuestra sociedad que afecta a muchas mujeres en todo el mundo. Para proteger a las víctimas, el sistema legal español ofrece diferentes medidas legales, la más efectiva de ellas es la orden de alejamiento por violencia de género, regulada por la Ley 27/2003, de 31 de julio.
Esta es una medida cautelar que consiste en una privación de libertad a través de la cual se prohíbe a un agresor acercarse a su víctima o a algunos de sus familiares. A continuación explicaremos en qué consiste esta orden, cuánto dura, en qué casos se puede solicitar y cómo llevar a cabo la solicitud.
Qué es una orden de alejamiento
Una orden de alejamiento es una medida cautelar impuesta por un juez que, por existir indicios fundados de la comisión de un delito de violencia de género, prohíbe al agresor acercarse a la víctima. Esta medida busca proteger a la víctima y evitar nuevos sucesos de violencia. La orden de alejamiento puede incluir:
- Prohibición de aproximación: el agresor no puede acercarse a la víctima a una distancia determinada, habitualmente entre 200 y 500 metros.
- Prohibición de comunicación: el agresor tiene prohibido ponerse en contacto con la víctima por ningún medio, incluyendo llamadas telefónicas, mensajes de texto, correos electrónicos o redes sociales.
- Prohibición de frecuentar ciertos lugares: sitios frecuentados por la víctima, como su domicilio, lugar de trabajo o lugares de ocio.
Será el juez el que delimite el alcance de estas prohibiciones atendiendo a las circunstancias particulares del caso.
Cuánto dura una orden de alejamiento
La duración de una orden de alejamiento por violencia contra la mujer puede variar dependiendo del caso, la decisión judicial y su momento procesal.
Por un lado, está el caso de una medida cautelar, donde estará vigente hasta que finalice el procedimiento o hasta que se modifiquen las circunstancias que llevaron a su adopción. En el caso de ser ordenada en una sentencia, su duración será la que el juez estime necesaria para proteger a la víctima y mantendrá su vigencia hasta que haya transcurrido por completo el tiempo fijado. Por último, si se trata de un delito grave, puede llegar a alcanzarlos 10 años de duración, y si es un delito de menor gravedad, la orden de alejamiento puede mantenerse hasta los 5 años.
De cualquier forma, la duración estipulada en un comienzo puede ser prorrogada si persisten las circunstancias que justifican la medida.
En qué casos se puede solicitar
Una orden de alejamiento puede solicitarse en diferentes situaciones de violencia machista, entre los que se contemplan:
- Violencia física: agresiones físicas como golpes, empujones…
- Violencia psicológica: insultos, amenazas, control, manipulación emocional o cualquier forma de maltrato psicológico.
- Violencia sexual: cualquier forma de agresión sexual, como abusos o violación.
- Acoso y persecución: seguimiento constante, acoso, vigilancia u otro tipo de comportamiento que genere miedo o inseguridad en la víctima.
No obstante, también se puede solicitar en casos donde exista riesgo inminente de que se produzca alguno de los anteriores tipos de violencia.
Cómo solicitar una orden de alejamiento
En primer lugar, es esencial que se haya iniciado un procedimiento penal mediante una denuncia. La orden debe solicitarse de oficio o a instancia de parte. No es suficiente con el testimonio de la víctima, para establecer una orden de alejamiento es necesario que existan pruebas, como puede ser un parte de lesiones. Por último, el juez es quien valorará si la persona afectada se encuentra en una situación lo suficientemente peligrosa como para imponer esta medida.
Contar con un buena asesoramiento desde el inicio del proceso judicial, es de vital importancia para poder obtener una sentencia favorable, en Elcano contamos un equipo de abogados especializados en Violencia de Género, con amplía experiencia y dispuestos a otorgar un asesoramiento adaptado a cada circunstancia.
