Conducir bajo los efectos del alcohol es una de las infracciones más graves y frecuentes en las carreteras españolas. En Elcano Abogados, estamos especializados en casos de alcoholemia en Bilbao y alrededores, y queremos ayudarte a entender cómo funciona la normativa vigente, qué límites legales existen y cuáles son las consecuencias si se superan esos límites.
¿Cuál es el límite legal de alcohol al conducir?
La Ley de Seguridad Vial española establece límites claros para la cantidad de alcohol que puede haber en la sangre o en el aire espirado al volante. Para la mayoría de los conductores, el límite máximo permitido es de 0,5 gramos de alcohol por litro de sangre, o 0,25 miligramos por litro en aire espirado. Sin embargo, para conductores noveles (con menos de dos años de carnet), profesionales y menores de 21 años, los límites son mucho más bajos: 0,3 gramos por litro en sangre o 0,15 miligramos por litro en aire espirado.
Esto significa que, para estos últimos grupos, cualquier cantidad que supere esos valores puede implicar una sanción, mientras que para el resto de conductores hay un margen algo más amplio, pero igualmente estricto.
¿Qué sanciones conlleva superar los límites?
Las sanciones por alcoholemia varían dependiendo de la cantidad de alcohol detectada y de la situación particular del conductor.
- En líneas generales, si la tasa de alcohol en sangre está entre 0,5 y 0,6 gramos por litro, se considera una infracción administrativa y se puede imponer una multa económica de 500 euros, además de la retirada de 4 puntos del carnet de conducir.
- Si la tasa está entre 0,6 y 0,8 gramos por litro, la multa económica sigue siendo de 500 euros, pero la pérdida de puntos aumenta a 6.
- Cuando la tasa supera los 0,8 gramos por litro, la situación deja de ser solo administrativa para convertirse en un delito penal. En estos casos, las consecuencias pueden ser mucho más graves, incluyendo multas judiciales variables, suspensión del carnet y hasta penas de prisión de hasta seis meses, dependiendo de la gravedad y circunstancias del caso.
- Para conductores profesionales, noveles o menores de 21 años, las sanciones son aún más estrictas, y cualquier tasa por encima del límite reducido puede acarrear tanto multas administrativas como penales, siempre con un enfoque de mayor protección.

El procedimiento tras un control de alcoholemia
Cuando un agente de tráfico realiza un control y detecta una posible infracción, normalmente se utiliza un etilómetro homologado para medir la concentración de alcohol en el aire espirado. Si el resultado es negativo o está por debajo del límite, el conductor puede continuar con normalidad.
En cambio, si se supera el límite permitido, se realiza una segunda prueba o, en ocasiones, se solicita un análisis de sangre para confirmar el resultado. A partir de aquí, se puede iniciar un procedimiento administrativo o incluso penal si la tasa es elevada.
Es importante destacar que, en cualquier momento, el conductor tiene derecho a solicitar asistencia letrada y a presentar recursos contra la sanción administrativa si considera que se han cometido errores en el procedimiento o que existen circunstancias atenuantes.
¿Qué hacer si te han denunciado por alcoholemia?
Ante una denuncia por alcoholemia, lo más importante es contar con el apoyo de un abogado especializado en alcoholemia que pueda asesorarte y defenderte. En Elcano Abogados revisamos cada caso con detalle, verificamos que las pruebas se hayan realizado correctamente y analizamos todas las opciones para minimizar las consecuencias legales.
Además, te ayudamos a conocer tus derechos para que puedas actuar con seguridad, ya sea recurriendo una sanción administrativa o enfrentando un proceso penal. Ponte en contacto hoy mismo con nosotros, te asesoraremos.